viernes, 29 de noviembre de 2013

EL IMITADOR DE VOCES


El imitador de voces, que ayer por la tarde fue huésped
de la Asociación de Cirujanos, se mostró dispuesto, después de
su representación en el Palais Pallavicini, al que lo había invita
do la Asociación de Cirujanos, a ir con nosotros al Kahlenberg,
para allí, donde tenemos una casa siempre abierta a todos los
artistas, exhibirnos también su arte, naturalmente a cambio de
unos honorarios. Rogamos al imitador de voces, que procedía
de Oxford, Inglaterra, pero había ido al colegio en Landshut y
 había sido en otro tiempo armero en Berchtesgaden, que
no se repitiera en el Kahlenberg, sino que nos representara algo
totalmente distinto de lo de la Asociación de Cirujanos, es decir, 
que imitase en el Kahlenberg voces totalmente distintas de
las del Palais Pallavicini, lo que nos prometió a nosotros, que
habíamos estado entusiasmados con el programa que presentó en
el Palais Pallavicini. Realmente, el imitador de voces nos imitó
en el Kahlenberg voces totalmente distintas, más o menos
famosas, de las de la Asociación de Cirujanos. Pudimos formular
también deseos, que el imitador de voces satisfizo con la mejor
voluntad. Con todo, cuando le propusimos que, para terminar,
imitase su propia voz, nos dijo que eso no sabía hacerlo.
 
THOMAS BERNHARD